Cuando intentamos explicar los fundamentos de la caja de cambios automatizada es porque no es una caja de cambios automática al uso, sino que es más bien una ampliación de la caja de cambio manual. Esto es porque permite cambiar las marchas automáticamente con un confort que equivale al de la caja de cambio manual, reduciendo el consumo de combustible.
Estas características hacen que esta tecnología sea interesante para vehículos de clase pequeña y media dado que sus costes también se sitúan claramente por debajo de un sistema totalmente automático.
Dispone de una amplia variedad de ventajas como su capacidad para funcionar en modo automático o manual o la facilidad para realizar maniobras sin que el motor se cale.
¿Cómo funcionan?
Su manejo es similar a las cajas de cambios automáticas, la palanca selectora de este tipo de caja dispone de las posiciones de punto muerto (N), marcha atrás (R), automática (A) y manual (M). La palanca selectora es totalmente electrónica y no está unida mecánicamente con la transmisión. Dado que la caja de cambios automatizada se basa en la caja de cambios manual, a diferencia de la caja de cambios automática, no existe una posición de estacionamiento (P).
No dispone de la posición de estacionamiento porque al desconectar el encendido, se introduce la marcha actual, y el embrague se cierra automáticamente.
En la caja de cambios automatizada LuK, esta unidad de mando está dispuesta en una carcasa común con el motor eléctrico y el sistema mecánico que se ocupa del accionamiento del embrague.
Se debe tener en cuenta que al cambiar la unidad de mando, debe instalarse el software específico del vehículo y realizarse una puesta en servicio.
Funciones especiales:
Las automatización de la caja de cambios debe responder a las numerosas situaciones que se producen durante la conducción sin degradarse o averiarse prematuramente. Para ello, cuenta con diversos modos de funcionamiento especiales:
Función ultra lenta
Una de las funciones a destacar es la función ultra lenta. Permite que al soltar el freno, el embrague se coloque ligeramente para que el vehículo ruede suavemente sobre el terreno sin necesidad de pisar el acelerador. En este modo se protege el embrague y, al aumentar la temperatura del embrague, se reduce el par.
Determinación del punto de contacto del embrague
Debido a las oscilaciones de temperatura y otras influencias externas, el punto en el que el embrague comienza a transmitir el par motor a las ruedas varía. Este punto se denomina punto de contacto. La caja de cambios automatizada adapta este punto de contacto siempre que el vehículo permanece durante un largo intervalo de tiempo con el motor en marcha y sin freno, por ejemplo, en un semáforo.
En este caso, el embrague siempre se cierra brevemente hasta que el ligero contacto de la placa de presión con el disco de embrague provoca una reacción del motor. Después, el embrague vuelve a abrirse inmediatamente. El conductor normalmente no percibe este proceso y presupone un ralentí estable del motor.
Protección del embrague
Una de las funciones de la caja de cambios automatizada es detectar cuándo se sobrecalienta el embrague. Esto puede suceder después de varios arranques en pendiente o después de circular con muy baja adherencia. Para reducir este aumento de la temperatura, se desactiva la función ultra lenta y, al arrancar, el embrague se cierra más rápido acortando los intervalos de tiempo con embrague deslizante.
Apoyo del freno ABS
Si la unidad de mando ABS comunica una operación de frenado con actuación del ABS, el sistema puede abrir el embrague para mejorar la eficacia de la regulación ABS gracias al desacople del motor.
Control de seguridad ISM
El sistema de control de seguridad inteligente ISM (Intelligent Safety Monitoring) controla el procesador principal a través de un segundo procesador. De este modo, y en caso de producirse un fallo, la unidad de mando puede reaccionar de dos formas diferentes: desconectando las fases finales de los actuadores para evitar el funcionamiento erróneo del sistema, o bien reiniciando la unidad de mando para que, tras unos segundos, ésta recupere su funcionamiento normal. Gracias a este sistema se controlan los efectos negativos debidos a fallos de la unidad de mando.
Fuente: Repxpert